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miércoles, 8 de diciembre de 2010

A son de guerra y su incidencia en la política dominicana

    Desde el inicio de nuestra época, se han podido notar los engaños y las mentiras a las que has sido sometida la población, estos en su gran mayoría han sido realizados por los gobernantes que hemos tenido. Al no estar de acuerdo con esto, algunas personas han buscado la manera de mostrarle a los demás, la verdadera realidad en la que viven y como sus gobernantes disfrazan esas verdades. Es evidente que se han tomado varios recursos para hacer llegar el mensaje, como pueden ser obras teatrales, libros, música, etcétera, las cuales buscan llamar la atención de las mayores potencias de la población. De esta forma se producen en ocasiones la transmisión de mensajes indirectos o críticos, como el caso de A Son de Guerra y su incidencia en la política dominicana.

      A Son de Guerra es un álbum musical que esta conformado por ritmos como el son, blues, cumbia, rock, jazz, rap y mambo, y a este disco su compositor se le refiere como "Disco muy variado". Es un álbum donde los temas son variados hasta en los tipos de ritmos implementados en estos y las letras que se desenvuelven en diferentes ámbitos de la vida. En estos temas se notan una diferencia total hasta en el significado lógico de las letras y las palabras que de una manera u otra llaman la atención al publico joven del país. Crear una letra que marque el pensamiento erróneo de las personas es algo complejo, al querer cambiar esos ideales pero esto es lo que quiere dejar plasmado Juan Luis Guerra con este álbum y su canción "La Guagua".

       El tema musical "La Guagua" del cantante y compositor Juan Luis Guerra no es mas que una critica al conflicto evidente del gobierno dominicano con los ciudadanos de este. En esta canción se expresa la problemática que envuelve a la República Dominicana desde hace años, pero que hasta el día de hoy no ha tenido freno. A pesar de esto, la sociedad dominicana no esta tomando cartas en el asunto debido al miedo que que el gobierno tome alguna represaría contra ellos. Sin embargo, los dominicanos están consiente de que el trato del gobierno no es el correcto aunque intenten disfrazarlo con obras que en vez de ayudar al país, crea mas conflictos es el.

     la sociedad dominicana se basa en diferentes clases sociales, la clase rica, la clase media y la clase pobre, pero también esta la clase indigente, que es la que no es reconocida ni para el censo dominicano. Sin embargo el país lo manejan las personas con mas dinero del país, aunque se crea que son los presidentes del país, y ese es uno de los errores que cometen los votantes paga impuestos. La canción "La Guagua" habla sobre que no debemos dejarnos engañar por alguien que solo nos miente para tener un puesto en lo alto mientras nosotros nos desvanecemos en la nada. Mientras tanto ellos siguen engañándose, haciéndose creer que hacen un buen trabajo y que el país es mejor por que ellos lo mantienen en un régimen, que manejan a su antojo.

    Para finalizar, es bueno alentar a las personas de que expresen lo que piensan y sienten de una manera que se hagan escuchar y que de una manera u otra puedan crear el cambio. También pueden crear grupos de personas que tengan sus mismas ideales y que con sus actos puedan ejercer una labor de cambio y desarrollo tanto social como económico. La canción "La Guagua" impulsa a que las personas tome una actitud diferente ante las problemáticas que todavía hoy azotan contra la sociedad dominicana, la cual debe tomar una actitud rebelde ante estas. Por esto es que la república dominicana debe luchar por mejorar su educación, por mejorar la manera en la que viven cada uno de los dominicanos y expresar lo que ocasiona A Son de Guerra
y su incidencia en la política dominicana.





    

   

Frank Báez [Rosario(17)]

El teléfono repica de nuevo.
Al octavo timbrazo extiendo un brazo fuera de la frazada, alcanzo el auricular y lo traigo hacia el interior donde está calientito.
-Aló.
-Hello, Frank.

Es Cecilia Galli. Siempre que hablo con ella por teléfono repite lo de Hello, Frank. Esto se debe a que hay una canción que se llama así escrita y cantada por Luca Prodan, líder de Sumo, banda que Horacio Galli siempre tiene puesta en el apartamento. Fue Horacio que me contó de Luca Prodan, que era italiano, que metía heroína, al punto que una mañana se levantó en la habitación de un hotel londinense, miró un mapa mundi, vio la Argentina y al igual que Paul Groussac, el abuelo de Pablo, sin pensarlo dos veces se vino hacia acá. No obstante, esto no impidió que luego de hacer una obra valiosa terminara muriendo a los pocos años de una cirrosis.
- Levantate de esa cama – insiste Cecilia - El día está lindo para pasear. Levantate.
-¿Qué hora es?

-Son las ocho. Hay un sol brillante y todos han dejado los abrigos en casa.
-Ah, pero no han pasado ni cinco horas desde que me acosté. Además, hoy es domingo.
-¿Y?
- Es que estoy desbaratado.

- Dejá de compadecerte y bajá rápido. Esperaré por vos acá en el lobby.
-Dame veinte minutos.
-Apresúrate.
Y cuelga. Y yo permanezco oyendo el zumbido del teléfono hasta que coloco el auricular en su sitio y saco la cabeza de la frazada con que me he cubierto. La habitación sigue como la dejé hace unas horas. Antes de pararme medito sobre todo lo que ocurrió anoche: la búsqueda infructuosa junto a Cucurto de un lugar para bailar cumbia y luego la visita a la habitación de Gabriela Bejerman. Al abandonar a Cucurto y los demás, le propuse a Cecilia ir a la habitación de Gabriela. De entrada esta se negó, pero a la larga me acompañó hasta el hotel Presidente. Sin preguntar en recepción tomamos el ascensor hasta el piso donde se hospeda Gabriela. Nos detuvimos ante su puerta. Antes de tocar pegué el oído a la puerta: no se percibía nada. 
Toqué. Nadie contesto. Toqué de nuevo. Entonces oí con claridad pasos, luego ya abrían la puerta y veíamos a Gabriela en bata y con crema untada en la cara.
-Dijiste que tendrías la fiesta más cool de Rosario en tu terraza – fue lo primero que se me ocurrió decirle.
-Ah, Che, yo cancelé.
- No me enteré.
-Yo les mandé mensajitos de texto a todos.
- Pero Gabriela yo no tengo celular.
-Cierto.

Entonces Cecilia que se había mantenido en segundo plano, alzó la vista y le lanzó una de sus miradas displicentes a Gabriela, quien no se quedó atrás y con sus ojos azules le lanzó otra. Era como si tuvieran rayos ultravioleta en los ojos.
-Disculpa, Gabriela – dije después de un rato, tomé de la mano a Cecilia y nos montamos en el ascensor. Acabamos la noche en un boliche de la Florida bailando al ritmo de un DJ con una cicatriz en la cara.

2

Abajo, sentada en uno de los muebles del lobby, Cecilia lee con serenidad una revista. A la izquierda los clientes del hotel avanzan hasta el restaurante donde está desplegado el desayuno. La recepcionista pronuncia mi nombre.
-Le dejaron esto – dice.
Me pasa una nota escrita con lapicero.
Espero que tu alzhéimer mejore,
Mariana
.

Me quedo un rato mirando la nota hasta que Cecilia se acerca. Intenta arrebatármela, pero yo me la guardo en el bolsillo. Caminamos hacia el exterior y una brisa tibia nos golpea la cara.
Es domingo. Hoy concluye el festival de poesía. Supongo que después de hoy los poetas van a volver a sus oficinas y a sus puestos prosaicos.
-Mientras esperaba por vos - dice Cecilia - tuve una charla con la poeta uruguaya.
-No jodas.
-Sí. Estaba desayunando en el restaurante. Yo la vi, me acerqué y charlamos un rato.

-¿De qué?
-De Rosario. Me pregunto si tenía un blog. Le dije que sí. Se lo di y ella lo apunto en una libreta. Luego me dio el suyo.
-Pero ella dijo en la charla que no tenía un blog.
-Lo sé.
-¿Y no se lo dijiste?
- ¿Para qué?
-¿Qué más te dijo?
-Creo que no dijo más. Se puso a jugar con la comida.
Alcanzamos el malecón y nos salen al paso corredo
ras y parejas hasta que llegamos a una terraza en que desayunamos. Le echo un vistazo al rio donde un carguero avanza y dos veleros son bamboleados por la brisa matinal. Más allá se ven las islas. Arriba en el cielo no hay una mancha de nube.
Mientras Cecilia se levanta para ir al baño, muerdo mi medialuna, oyendo de paso la conversación que dos tipos mantienen a mi derecha. Se están recomendando psicoanalistas. El que tiene una voz gangosa le da las especificaciones: la edad del psicoanalista, la corriente
que sigue, su tarifa y su ubicación. Pudiera instalarme en esta ciudad y trabajar de psicólogo. Pegaría afiches en las paredes de que soy un psicólogo dominicano que usa las últimas tendencias cognoscitivas caribeñas. Eso sonaría exótico. Pablo sugirió que pudiera pegar un poster de las Terrenas en el consultorio y que eso serviría de terapia. Me caen bien los argentinos. No importa que me hayan estafado y que algunos taxistas y dependientes de quioscos hayan sido impertinentes y hasta groseros conmigo. Incluso recuerdo cuando aterricé en Buenos Aires de madrugada que miré por la ventanilla y estaban todas las luces encendidas tililando como dándome la bienvenida. Estaba algo nervioso, ya que en Santo Domingo la dependiente de la línea aérea y la encargada de migración me habían contado que debía traer más de mil dólares en efectivo, que de acuerdo a ellas, lo piden al ingresar a la Argentina y que si uno no los tiene, pese a las tarjetas de crédito que se puedan portar, no lo dejan entrar. ¿Cómo es eso de que no dejan entrar? ¿Me montarían en el próximo avión con destino a Santo Domingo o me dejarían ahí pululando en el aeropuerto sin que pueda salir hasta que semanas luego mi avión par
ta? Puesto que no estaba seguro de tener los mil exactos, me puse a contarlos antes de abordar el avión y comprobé que me faltaban quince dólares para completar los mil. Debido a esto no compré un cebiche que se me antojo en el aeropuerto de Lima. Cuando hice la fila de migración en el Ezeiza de Buenos Aires temía que el oficial me devolviera por esos quince dólares que faltaban para completar la tarifa. Avancé nervioso hacia la cabina. Le pasé el pasaporte al oficial que me atendió.
-¿A qué viene a la Argentina? - preguntó.

-A un festival de poesía- le dije con la voz temblorosa.
-Ah, usted es poeta, que alegría. Todo está en orden. Avance, avance.
Así que esa fue mi bienvenida a la Argentina. Es una lástima que partiré en la tarde a Buenos Aires, que permaneceré hasta el jueves en el apartamento de Horacio y que luego retornaré a la isla. Esto significa que me quedan cinco días exactos en territorio argentino. En el ínterin, tendré muchas cosas que hacer. Hago una lista.
1-Participar de oyente en una lectura en el Centro Cultural de la Cooperación ubicado en la avenida Corrientes.
2-Visitar un programa de radio que coordina Luc
ila Rondón donde hablaré de poesía y leeré mis poemas.
3-Ir a una lectura en una librería de San Telmo donde participaré junto a Pablo Marchetti, a Daniel Riera y Sebastián Kirzner.
4-Entrevistar a César Aira.
Tras desayunar paseamos por el malecón viendo los faroles en forma de bastones que dan al rio. Algunas parejas están sentadas en los bancos de madera y miran la orilla opuesta del río y uno que otro velero. A nuestro lado pasan las corredoras. Por doquier se ven los que vuelan chichiguas y los que juegan con frisbees. Llegamos entonces a los galpones que se encuentran pintados con aerosol y que parece que intervenieron artistas callejeros
. Le tomamos fotos a las ilustraciones de las puertas de los galpones que se van sucediendo. Hay uno de monos asustados. Hay de skaters. Hay uno de una calavera. Hay de cotorras. Hay uno con una pasola. Hay uno de Buster Keaton
Dejamos atrás los galpones y esquivando los charcos y el lodo que formaron las lluvias pasadas, alcanzamos un parque.

-¿Tienes un psicoanalista? - le pregunto de repente a Cecilia.
-Tenía una.
-¿Y qué paso?
-Empecé a escribir y me di cuenta que no la necesitaba. A medida que escribía la necesitaba menos. Faltaba a las sesiones y me sentía mejor. Creo que la mejor forma de conocerse es escribiendo.
-Es cierto.
-Ella leía mi blog.
-¿Y qué le parecía?
-No, lo leía para saber si había escrito de ella. Estaba obses
ionada con eso.
Del otro lado del parque hay un mercado de pulgas que entusiasma a Cecilia quien apresura el paso y que tan pronto llega se pone a husmear por los tenderetes en busca de regalos para sus hijos y su marido. Los vendedores mateando en un rincón apenas tienen tiempo para regatear con los potenciales clientes. Algunos escuchan cumbias villeras en radios portatiles. Mientras regateo con un boliviano una cartera para mi sobrina, Cecilia da con una mujer que vende unos títeres hechos de madera.
Dejamos el mercado atrás. Atravesamos parques con flores y pájaros en los arboles que cantan que la primavera fue hoy que llegó. Llegamos al Monumento a la Bandera. Según lo que cuenta Cecilia, fue en Rosario que se izo por primera vez la bandera. Fue el general Belgrano en 1812 y que debido a esto se erigió el monumento que consta de varias partes, como el patio cívico, el propileo y una llama para el soldado desconocido. De ahí avanzamos frente a las fachadas de edificios antiguos hasta la peatonal Córdoba. Casi no hay gente transitando. Apenas algunos mendigos y una que otra rosarina con gafas de sol. Luego de pasar una edificación antigua siento algo tibio en mi cabeza y cua
ndo me paso la mano compruebo que nuevamente una paloma me ha cagado.
-Eso es buena suerte – dice Cecilia aguantándose la risa.
-Anoche me cagó otra.
-Ah, tienes que jugar la lotería. Jugá el número de tu cumpleaños.

interpretación argumentativa de ángel para una tambora

La magnifica canción “Ángel para una tambora” de Juan Luis Guerra, muestra como el merengue a pasado de generación en generación y de país en país. Encierra lo conocido que se ha vuelto este género en todo el mundo. Esto se lo podemos confirmar en el fragmento de la canción que dice: “Por allá por el estado de Zuila en la parte norte de Venezuela le nacieron alas a mi  tambora tierra adentro con la tumbadora mil luceros forjan tu corona nunca muere, ey, mi tambora”. En particular me encanto la canción, pues pone de manifiesto la música que nos identifica como orgullosamente dominicanos.

Final de el árbol del orgullo

De inmediato el árbol del orgullo fue llevado por los demás árboles ante la madre naturaleza, la cual vivía en el interior del bosque. Era hermosa. Tenia un vestido de la misma textura fibrosa de  los árboles, sus cabellos eran de hojas verdes, como si fuera la copa de un árbol y su piel amarilla y radiante como el mismo sol. Los demás árboles, comenzaron a contarle sobre el delito que había cometido el árbol del orgullo y al terminar, la madre naturaleza tomo una decisión. Tenía dos opciones, la primera era ser hechado de la tribu de los árboles para siempre y vivir el resto de sus días en la montana más alta del bosque sin compañía alguna. La segunda opción, era ser hechado al fuego por el mismo Securis, el monje de estos. Los optaron por hecharle al fuego, pues pensaban que ese pecado no merecía el perdón de la vida. El castigo fue pautado para la mañana del día siguiente. El árbol del orgullo se sintió muy culpable, ya no resistía mas. Y decidió envenenarse tomándose una coca-cola Zero comprada en el colmado “la panchita”. Comenzó a sentirse débil, sus plumas azules comenzaron a caer una por una y se desplomo al suelo, como si una cierra lo hubiese cortado. Los demás árboles aprendieron la lección, nunca debes desobedecer las reglas.

Final de la pagoda de Babel

El ambicioso sultán, observo aquel agujero y por descuido cayo en el. Mientras caía pudo ver como se alejaba la luz, y de pronto todo estaba oscuro. Duro mucho en esta situación. Pudo caer por horas y hasta días por lo que se quedo dormido. Al despertar se dio cuenta que estaba que estaba en una especie de túnel donde solo se veía un pequeño rayo de sol que salía de una puerta. Al salir de allí, se encontraba en un mundo muy diferente al suyo. Todas las personas que vivían en ese pueblo andaban descalzas, solo tenían, si a caso, 2 mudas de ropa, andaban a pie y compartían todo. Lo asombroso de todo esto es que nadie se quejaba, todos eran felices con la vida que llevaban. Aladino les pregunto que por que no les importaba vivir así en esa vida tan mediocre. Uno de ellos llamado Miguel, al cual le decían rapidito, le contesto: “No es una vida mediocre, sino humilde pues nadie en este pueblo se cree superior que los demás. Todos nos conformamos con vivir de esa manera por que no necesitamos más. Es mejor ser humilde, y tener muchos amigos que ser ambicioso y estar solo.” Entonces, Aladino comprendió que su vida no tenia sentido, pues por su ambición y soberbia no tenia ningún amigo. Y aprendió la lección, es preferible compartirlo todo y tener personas con quien contar, que no compartir nada y estar solo.

Final de un autentico fantasma

Johnson, siempre tuvo la ilusión de ver a un autentico fantasma, aunque no se daba cuenta de que era uno. Un día, siguiendo con su búsqueda se encontraba en el sótano de un gran teatro y allí descubrió algo emocionante. Al abrir la puerta encontró un cuarto lleno de espejos. Al acercarse a uno de ellos se dio cuenta de que su búsqueda había terminado. Se dio cuenta de que el autentico fantasma que buscaba era el mismo. Con esto aprendió una gran lección:”Muchas veces buscamos en el mundo lo que podemos encontrar en nosotros mismos”.

Final de el sueño del rey

Si, soñaba contigo y solo es parte de su sueño. Se siete un rey por que en su sueño estas tu, y si tu no estas, no se sintiera como rey. Mientras sueñe Contigo, será rey. Pero ah despertado y ya no existes, ya no existe su reinado.

Final de el gesto de la muerte


Cuando el jardinero llega a Ispahan, se encuentra nuevamente con la muerte. Y el jardinero le pregunta:

-Por que me sigues? No ves que no quiero morir.

A lo que la muerte le contesto:
-Solo te advertía que esta noche te irías conmigo y aquí mismo en Ispahan seria nuestro encuentro.

El jardinero asustado le pregunta:
-Que puedo hacer para no irme contigo esta noche?

La muerte le contesto:
-Para evitarlo harás lo siguiente: te comerás un longui, visitaras al Sennin, me traerás una pluma del árbol del orgullo, envenenaras a Aladino, me traerás el dedo pulgar de Mr. Valdemar y por ultimo, visitaras a Héctor Santana y le contestaras a todo lo que te pregunte:” En tu mente cacaito”. Y así lo hizo. Cumplió con todo lo que le pidió la muerte, pero cuando fue en búsqueda de Héctor Santana en la puerta de su casa encontró una nota que decía:”No estoy, huyo de los motoconchos escribiendo poesía practica andando por los caminos del ensayo”. El jardinero, por causa del querido Héctor, no pudo completar su misión y la muerte se encargo de este llevándolo consigo.

Final de la persecución del maestro

El discípulo levanta la cara y se da cuenta que su maestro Tipola, estaba muerto. Al que le puso la cabeza en los pies fue a su fantasma. Desesperado, el discípulo tomo una soga, la colgó del árbol y se suicido. En el cielo, ambos se encontraron y Tipola le pregunta al discípulo: ¿Por qué tenias tanto afán en buscarme? Y el le contesto: Quería enseñarte mi nuevo Iphone.

Final de una noche en una taberna

Cuando los sacerdotes llegan a la taberna  en busca del rubí del ídolo, conversan con el niño y le dicen que no quieren matarlos que solo quieren el rubí para construir de una forma u otra una bomba atómica con el. El niño le ofreció algo mejor. Cambiarían el rubí por dinero para dividir la ganancia entre  todos y a cambio les regalarían un pastel de chocolate a los sacerdotes. Estos aceptaron. El niño y sus amigos le prepararon el pastel, pero cuando estos comenzaron a sentirse mal. Los sacerdotes fueron envenenados por el niño y sus amigos. Al final fueron ricos y felices por siempre pues el ídolo ya no los persiguió mas.

Final de sueño de mariposa

Cuando despertó se estiro un poco, toco su espalda para ver si tenia las alas de mariposa y si, si las tenia. Mira sus pies y eran humanos, entonces,  que era realmente? Tzu miro su reflejo en el lago y se dio cuenta de que era mitad hombre, mitad mariposa. Entonces, Estaría soñando?.

Final de ser polvo.

La tuna, osea el árbol, creció seco, inmediatamente le crecía una hoja se le caía. Esto se debía al terrible y oscuro corazón que tuvo siendo humano. Todos los días venia un perro para hacer sus necesidades en sus raíces. Pero un di, la tuna se desespero y cuando el perro, fue a la misma hora de siempre, este dejo caer una rama en su cabeza. Desde entonces nadie se acerca al árbol, pues su corteza es dura y su interior polvo.

Final de la casa tomada

Cuando Irene y yo salimos de la casa, como ya no teníamos mas opción, salimos en búsqueda de un lugar donde pasar la noche. Pero al caminar, escuchamos nuevamente un ruido que nos dejo inmóviles mirando la puerta de la casa. De repente la puerta trato de abrirse. Yo corrí y la cerré de golpe. La casa estaba tomada por curraps, unas criaturas que comen carne humana. Pero gracias a Dios yo estaba informado de ellos. Eran alérgicos al brócoli y entonces fue en ese momento que tuve la gran idea. Fuimos de inmediato al  supermercado y compramos decenas de brócolis y los llevamos hacia la casa. Entramos cubiertos de ellos y los curraps comenzaron a salir de la casa hasta no quedar ninguno. Desde entonces en nuestro jardín no hay flores, solo una gran plantación de brócolis frescos.

glotonería mística


Cuando el monje vio que salieron los peces de su orina, se asustó. Y desesperado le prguntó al pescador :
-que vamos a comer? pregunto el monje.
-no hay nada para ti! dijo el pescador...
-pero solo quiero un poco de comida. exclamo. 
-de acuerdo. dice el pescador.
   Entonces el pescador le dio una sopa al monje que lo mato y después desintegro su cuerpo el cual sirvió para ser el alimento de los peces.

interpretación argumentativa de sennin

Bueno, empiezo por decir que sennin es uno de los cuentos mas interesantes que he leído. Ya que en la historia gonzuke, quien quería ser un sennin, estaba buscando la manera de poder realizar sus sueños, pero lo que no me gusto fue su ignorancia de creer que si llegaba a ser un sennin podría volar y ser inmortal por siempre.

interpretación argumentativa de men in the Chair

esta película me fascino mucho, por que es una historia que no se ve a diario, y me gusto que el protagonista que era Flash, veía la vida como una película de los tiempos pasados y que con esto quería que las personas vieran lo que el veía cuando estaba caminando.

Final de los Donguis

        la verdad es que esa noche, fue algo increíble... por que después de que los donguis aparecieron nos llevaron a un lugar muy extraño y no podía ver en donde estaba por que estaba muy oscuro. y de repente desperté en mi casa y me di cuenta que todo había sido un sueño. 

interpretación argumentativa del 2do. mandamiento

    Este mandamiento fue muy agradable y divertido a la vez, ya que nos hace salir de una burbuja en la que llevamos encerrados, pensando cosas que no son pero que en realidad creemos por nuestra misma ignorancia.